Mientras espero que me lleguen las cajas y el material para empezar a empaquetar todo y, de paso, contaros uno de los temas esenciales cuando uno se muda a vivir a otro país - la mudanza - os contaré que llevo exactamente diez años y cinco meses viviendo en Tarragona...bueno, los dos últimos años en Torredembarra, un pequeño pueblecito a 15 km, pero para el caso es lo mismo :-). Y en estos años han pasado muchas cosas...ahora que lo pienso, probablemente sea la época de mi vida que más cambios a nivel personal he experimentado y eso me ha enriquecido muchísimo. Definitivamente no soy la misma persona que llegó aquí con toda la ilusión del mundo - eso siempre - para comenzar una nueva etapa, ni mejor ni peor, simplemente distinta.
Y es ahora, cuando inevitablemente una tiene que despedirse con un ¡hasta siempre! de la gente que ha conocido y con la que ha compartido tantos momentos cuando afloran tantos recuerdos y una cierta añoranza se apodera de tí. ¿Volveremos a vernos? Quiero pensar que si y si no será que no tenía que pasar.
Hace unos días tocaba despedirse de mis compañeras de baile y, como les había prometido, preparé una cena hindú en mi casa a la que vinieron todas vestidas para la ocasión. ¡Gracias chicas, estábais divinas! ¡Y lo pasamos genial, fue muy entrañable!
Empecé a bailar en Tarragona allá por el curso 2007-2008. Me apunté en la Escola de Dansa Indra y directamente a clases de flamenco. Al fin y al cabo, siendo "flamenca" por ambas partes, era lo que llevaba dentro y lo que desde pequeñita me gustaba. Porque yo empecé a bailar con 5 añitos y no se me daba mal, aunque mi primer traje de gitanilla me lo compraron mis papis con sólo cuatro añitos...
En fin, que como os decía empecé en la escuela haciendo flamenco con mi profe Gaby (¡que grande eres! gracias por enseñarme tanto y por tu amistad) y sólo tres compañeras más, Diana (mi LoreDi), Verónica y Esther. Pero ese año nos montamos tres coreografías y nos lo pasamos genial. Y eso que era la primera vez que me subía a un escenario, el del Teatro Metropol de Tarragona, donde siempre hacemos el festival de fin de curso con toda la escuela. ¡Que arte, si hasta bailamos en las fiestas del barrio!
A principios de 2009 me quedé embarazada así que decidí dejar el flamenco por una temporada, me parecía que tanto zapateado lo mismo no era demasiado bueno...pero no me sirvió de nada porque el Universo no quiso que prosperara y lo perdí. Fué una época muy dura porque nos hacía tanta ilusión... Descubrí que necesitaba el baile como terapia así que volví a la carga el curso 2009-2010 y esta vez probé con la danza del vientre. Verónica, mi profesora (y amiga) desde entonces y directora de la escuela, fue quien me lo recomendó y ahí empezó mi andadura por los bailes orientales. Cambio de técnica y de compañeras (Esther ahí fue cuando te conocí y me enamoré de tu forma de bailar) para descubrir que, aunque me encanta y me defiendo, no he nacido para ello, digas tu lo que digas Vero, jajajajaja. ¡Nunca me saldrá el shimmy ni el camello!
Al siguiente curso 2010-2011, y ya metida de lleno en lo oriental, decidí probar con el Bollywood...¡y es lo mejor que pude hacer! Es, con diferencia, donde mejor me lo he pasado, donde he conocido más compañeras, donde he sufrido más con las coreografías pero más satisfacciones me ha proporcionado. De vez en cuando veo las fotos de todos los festivales y actuaciones (o bolos) que hemos tenido y cómo hemos cambiado, sobre todo mi pequeña Irene, y no puedo más que sonreír y dar gracias por todo lo que me han dado.
De ese primer grupo de iniciación nacieron las Xunaris en contraposición a las Xelitos, que eran las avanzadas...y ese año 2011 debutamos en el festival...¡que colorido! Y actuamos juntas en las fiestas del barrio, fue mi último año de danza del vientre... De aquel
primer curso de bollywood continúo con Silvia (mi campanilla), Eva (¡que
bien bailas joía!), Raquel (que grande eres dentro de ese cuerpecillo)
e Irene (nuestra peque a quien hemos visto crecer año tras año). De otras compañeras
que nos dejaron como Pili, Sonia o Isa guardo un recuerdo muy cariñoso,
lo pasamos muy bien bailando juntas ¿verdad chicas?.
Durante el curso 2011-2012 me inicié en las danzas zíngaras...de alguna manera aunaba mis dos espinitas - flamenco y danza del vientre - y tengo que decir que me ha encantado la experiencia, jejejejeje. Junto con el de bollywood, este es el vestuario que llama siempre más la atención. ¿Por qué será? Xelitos y xunaris somos ya todas uno y se incorporan al grupo Vanessa (¡ole tu! no hay nadie más animado en el mundo mundial) y Andrea (exquisita cuando baila). Y nos metemos en varios "fregaos" (es decir, espectáculos) que ponen a prueba la paciencia (y los nervios) de nuestra querida profe...pero de los que salimos más que airosas: L'Home del Paraïguas en el Teatro Camp de Mart de Tarragona y la II Gala Solidaria Ethno, organizada por l'Associació Oncològica Dr. Amadeu Pelegrí, en el Teatre Auditori de Salou.
El curso 2012-2013 Vero decidió que que no haría festival pero nosotras continuamos bailando y aprendiendo ¡y así cogimos el de este año 2013-2014 con tantas ganas! Y es que tengo que decir que el festival de este año ha sido especial, no sólo porque he vuelto a bailar flamenco de la mano de mi nueva profe Yohanna, que tiene más salero que na, sino porque nos lo hemos pasado genial.
A pesar de los nervios, los cambios de vestuario, la responsabilidad y las ganas de hacerlo bien, ha sido para mi el mejor festival sin duda. Gracias Marina, Cristina, Anna, Irene, Laura, Elisenda, Pilar, Emma y Susana a las que conocí este año y con las que he compartido nervios, cenas, risas y muy buen rollo. A las xelitos que quedan Rosa (nuestra gran fotógrafa), Eli (¡no! ¡no voy a kathak!), Marina y Marisol porque llevamos "sufriendo" juntas un buen rato y se os coge mucho mucho cariño.
No quiero acabar esta entrada, mi particular homenaje a TODAS y cada una de mis compañeras de baile durante estos años, sin tener una mención especial a dos personas.
Una de ellas es Maite, la mamá de todas...no he visto a nadie con tanta creatividad para diseñar y coser el vestuario de la escuela...¡eres una crack! gracias por todas las charlas arreglando el mundo y por los abrazos...Y la otra es Vero, mi mentora, la que me ha enseñado todo a base de paciencia, exigencia y saber estar...¡eres GRANDE! Gracias por los momentos en que te he visto bailar y me sigo emocionado...y cabreando porque es cuando te das cuenta de que lo que tu haces no se parece en naaaaaada a lo que ella hace, jajajajajajaja. Siempre siempre estarás en mi corazoncito....forever and ever together (¡a ver si mejoras el inglés y punto!). Te espero en Holanda...;-)
A mi también me atrae la Danza del Vientre y el Bollywood pero... todo no lo puedo hacer!! Quizás más adelante, aunque he probado alguna clase y me ha encantado! Lo último en lo que estoy liada es el Booiaka, aix!! Lo has probado? Ana Belén es una pasada como instructora!!!
ResponderEliminarSi lo se, no se puede abarcar todo! Y si te he visto dándole al booiaka, jejejeje. No he probado pero he visto a Ana (ella es fantástica bailando hip-hop) y ya le dije que no se me da nada bien! Pero quien sabe, lo mismo acabo haciendolo en Holanda!
EliminarGracias a tambien a ti
ResponderEliminarMargot nunca se me olvidara, que cuando llegue el primer día a clase, junto con Maite y Vero fuiste una de mis de las compañeras de baile que me acogio en clase (ese primer dia, en el que no conocia a nadie), y me hizo sentir en seguida como una más del grupo.
Después todas os convertisteis en una amigas increibles ...y mi familia de baile y que tantos buenos momentos hemos pasado todas juntas.
Espero que esteis genial. Un beso para Danny y otro para ti
MMmuuuaaakkksss
Gracias guapaaaaaaaaaaaaa, otro besazo para ti!
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